Desafortunadamente debido a la situación de inseguridad por la que está pasando el país, es común y en ocasiones frecuente escuchar de algún conocido a quien le fue robado material o equipo en una obra. El robo o perdida de equipos ligeros, al ser de considerable valor, puede ocasionar un fuerte daño a la planeación económica y de recursos de nuestra obra. También es necesario mencionar que solo un bajo porcentaje de los equipos y el material robado en las obras es recuperado, es por esto que se deben tomar medidas para minimizar los riesgos y salvaguardar de la mejor manera posible nuestra propiedad o la de terceros en la construcción. A continuación mencionamos una serie de consejos y recomendaciones que debemos seguir en la obra para mantener segura nuestra maquinaria ligera:
Elige un lugar seguro para guardar los equipos una vez concluido su uso por el día. Lo recomendable es planear una ubicación segura para la maquinaria ligera y el material (como una bodega) previo a comenzar la construcción por el tiempo que vaya a durar la construcción. En caso de que el riesgo de robo en la zona sea alto, considerar la posibilidad de que una persona de confianza se lleve los equipos de la obra y los regrese al día siguiente.
- Evitar dejar los equipos a la vista de todos mientras estos no se encuentren en uso. Procurar no descuidarlos ni perderles de vista en tiempos de descanso.
- Procurar contar con iluminación adecuada en los espacios. La mayoría de los robos ocurren de noche, por eso al contar contar con iluminación reducimos el riesgo de que un robo pase desapercibido.
- Contar con veladores en la obra. Una obra que se vea sola y sin vigilancia se vuelve un blanco más fácil para quien pretenda realizar un robo a la propiedad.
- Invertir en medidas de seguridad adicionales. Aunque se traduzca en un costo adicional (no necesariamente alto), es importante considerar la opción de instalar equipo de seguridad como alarmas y cámaras de vigilancia para la obra. Más vale prevenir que lamentar.
- En el caso de equipos arrendados, acodar con el proveedor una fecha y hora de recolección del equipo en cuanto se haya terminado su uso. Procurar no permanecer con los equipos más tiempo del necesario.
Es necesario recordar que si bien no existe el riesgo cero, si seguimos estos consejos adecuadamente podremos reducirlo al máximo posible y lograr que nuestras obras se vuelvan lugares mucho más seguros.